Al mal tiempo, buena… castaña
¿Sabías que la castaña es un fruto seco y, sin embargo, su composición nutricional se asemeja más a la de un cereal? Baja en grasa y rica en hidratos de carbono y fibra, durante siglos fue utilizada como harina para elaborar pan. Es la reina del Otoño, con fiesta en su honor cuando finaliza su recolección, aunque la patata y el maíz le robaran popularidad.
Bizcocho de castañas sin azúcar, sin harina, sin gluten y sin lácteos.
Esta receta dulce no es una receta corriente. En ella no hay harina, ni azúcar ni otro endulzante que se le parezca. Tampoco lleva leche ni yogur, ni siquiera su símil, la bebida vegetal. Eso sí, lleva huevo y requiere de horno, aunque no más de 20 minutos.
¿El secreto?
Un fruto seco: la castaña.
Galeno, padre de la Medicina y de la Farmacia, ya la definió como el fruto salvaje más nutritivo. Sin embargo, a pesar de ser un fruto seco, como la nuez o la avellana, la castaña apenas tiene grasa y es mucho menos calórica.
¿Qué la hace tan nutritiva entonces?
La castaña es rica en hidratos de carbono, razón por la cual durante siglos fue considerada un alimento básico sustituto de los cereales. Sin olvidar su aporte de minerales, como el potasio, hierro, calcio, y de vitaminas C, E y folato.
Su sabor dulce la convierten en una perfecta candidata para elaborar postres en los meses de Otoño. Hace el papel de la harina, sólo que su riqueza en fibra, vitaminas y minerales la convierte en una alternativa mucho más saludable, puesto que apenas va a alterar nuestra glucosa en sangre ni nuestro nivel de inflamación, como sí ocurre con el azúcar y la harina refinada.
¿Qué ingredientes necesitas para preparar 4 raciones de bizcocho de castañas?
¡De 4 a 6 ingredientes, depende de ti!
1 plátano grande
Castañas asadas (170 g)
1/2 boniato pequeño asado (30 g)
1 huevo
Chocolate 85% cacao (30 g = 3 onzas aprox.) (opcional)
Levadura en polvo (1 c.p.)
Información nutricional de 1 ración:
204 Kcal
31,8 g hidratos de carbono
5,3 g proteína
5,7 g grasa
4.2 g fibra
Tiempo de preparación: 25’
Precio total:1,3-3,8 euros
Elige alimentos de temporada
La naturaleza es sabia y nos ofrece, en cada estación, los alimentos que nuestro organismo necesita en cada momento. Así, las frutas y verduras del Verano buscan hidratar y enfriar nuestro organismo. En cambio, las frutas y verduras propias de los meses de frío buscan optimizar nuestro calor corporal y mejorar nuestras defensas de cara a prevenir los resfriados típicos de los meses de Invierno.
Cuando no sea temporada de castañas, sustitúyelas por copos de avena y haz lo mismo con el boniato. Prueba a cambiarlo por manzana o zanahoria o calabaza, según el momento del año y, por supuesto, tus gustos.
¿Qué pasos debes seguir para su preparación?
1
Precalienta el horno a 180ºC con calor arriba y abajo (10 minutos aproximadamente).
2
Tritura el huevo, plátano y castañas junto con la calabaza/zanahoria/boniato asadas en un recipiente apto para batidora.
Para la preparación de esta receta he escogido medio boniato asado.
3
Añade la cucharadita de postre de levadura a la mezcla y remueve homogéneamente.
Mezcla lista para hornear :)
4
Forra un recipiente pequeño con papel de horno y coloca en él la masa con la ayuda de una espátula.
5
Trocea con la mano las onzas de chocolate 85% cacao o superior e inserta trozos del mismo en distintos puntos de la masa.
Puedes obviar el chocolate si no te gusta y, también, prescindir del papel de horno si no tienes en casa. Como la masa es muy pegajosa, puede ocurrir que se te rompa al servir, pero estará igual de rico :)
6
Hornea durante 20 minutos a 180ºC con calor arriba y abajo
y…
¡Disfruta!
Bizcocho de castañas con chocolate listo para tomar :)
¿Sabías que…?
La castaña contrarresta su bajo contenido en sodio con una buena dosis de fibra. De aquí viene el famoso dicho “tirarse una castaña”, aunque lo cierto es que las alcachofas les llevan una marcada ventaja. Con 7 gramos de fibra por cada unidad, con 4 alcachofas cubrimos holgadamente nuestras necesidades diarias de fibra.
Además de asada, se puede consumir cocida, y su composición nutricional varía de forma asombrosa de una a otra. Si quieres un aporte extra de nutrientes, apuesta por el horno para su preparación. La cocción en agua reduce su contenido de hidratos de carbono y proteínas a la mitad, entre otros nutrientes, mientras que preserva mejor la vitamina C que su homóloga asada. Tú eliges qué necesitas en cada momento pero, recuerda, a mayor variedad de alimentos y tipos de cocciones en tu alimentación, mejor que mejor.